La franquicia Call of Duty ha explorado ambientaciones tales como la Segunda Guerra Mundial, la Guerra Fría, la Guerra Moderna y algo de lo que podría llegar a ser el futuro. Ahora, con la llegada de una nueva entrega, Activision e Infinity Ward apuestan por una nueva ambientación que espera renovar la experiencia de los fanáticos de la saga.
[Historia] ¡De regreso al futuro!
Al igual que en Advanced Warfare y Black Ops III, Call of Duty: Infinite Warfare presenta una historia distópica en la que los recursos de la Tierra han sido agotados y la única forma de obtener energía es a través de la exploración de otros planetas. Tomarás el papel del teniente Nick Reyes, un piloto de la SCAR (Special Combat Air Recon), cuya vida cambia después de que la SDF (Settlement Defense Force) ataca la Tierra con el fin de conquistar el universo, incursión que es liderada por el almirante Salen Kotch.
Desafortunadamente, una las manchas más notables de Call of Duty: Infinite Warfare es este último personaje, pues aunque cuenta con la interpretación de Kit Harrington —Jon Snow en Game of Thrones—, este villano apenas tiene presencia dentro del juego. Eso sin dejar de lado que sus motivaciones no son claras: sabemos qué quiere, pero no por qué.
Tal como en las otras entregas de la franquicia, el argumento de Call of Duty: Infinite Warfare gira en torno a la venganza. Desafortunadamente, esto lleva a que se repitan muchos clichés. SIne embargo, el enfoque hacia la ciencia ficción hace que la trama se mantenga interesante, aunque si hay que resaltar que es la más simple de toda la saga. Eso sí, es de admirar que este título hace énfasis en el sacrificio de los soldados, brindando así un tono más dramático a los eventos vistos a lo largo de la campaña principal.
[Jugabilidad] Esto no es Star Wars, pero se parece
Call of Duty siempre ha mantenido el esquema de controles básico para disparar. Al ser un sucesor de los más recientes títulos futuristas de la saga, Infinite Warfare opta una vez más por una jugabilidad veloz y vertical, llena de gadgets que nos asistirán durante la campaña principal.
No obstante, las ocasionales batallas espaciales te harán sentir que Call of Duty: Infinite Warfare es un juego totalmente diferente. No solo podrás personalizar tu nave, sino que podrás enfrentarte a hordas de villanos en el espacio a toda velocidad. Y no solo eso: este vehículo también servirá como soporte dentro de misiones en tierra, ya que te ayudará a desplazarte.
[Multijugador] Deja Vu a Black Ops III
El modo multijugador de Call of Duty: Infinite Warfare va a la segura y se mantiene fiel a las mecánicas de Black Ops III, por lo que los jugadores podrán correr por las paredes e impulsarse entre saltos. También está de regreso el sistema de clases, denominado en esta ocasión como ‘Combat Rigs’. Cada ‘Combat Rig’ cumple un rol específico dentro del combate y cuenta con sus propias habilidades especiales, las cuales se podrán habilitar tras unos minutos de juego. Si bien suena que esto puede alterar el equilibrio del juego, la verdad es que permite que los jugadores puedan experimentar y acomodarse a un estilo de juego.
Además del profundo sistema de personalización de armas y personajes, Call of Duty: Infinite Warfare no trae nada nuevo a la mesa y hace que este multijugador no se sienta tan diferente a lo visto en Black Ops III, lo cual podría molestar a algunos jugadores.
[Modo Zombi] ¡Vale cada centavo!
Una de las grandes sorpresas de Call of Duty: Infinite Warfare es Zombies in Spaceland, el cual llega a esta entrega con una estética renovada basada en cintas de los ochenta y cuenta con su propio argumento. Esta vez, el modo zombi brilla por su personalidad, color y constantes referencias a novelas de terror. Es una lástima que para aprovechar de este modo de juego se requiera de la compra de múltiples DLC, tal como lo ha hecho Activision con otras entregas.