Hasta aquí trajo el río a Ouya, la consola de juegos basada en Android que nació en el boom de los proyectos financiados por Kickstarter. Después de cuatro años de haberse producido la última consola, la tienda digital de la plataforma será desactivada en junio.
Razer –quien ahora es dueño de la agonizante consola– otros proveedores como Forge TV y MadCatz Mojo también serán apagados en el próximo mes. La compañía invita a los dueños de una Ouya que hagan sus respectivas descargas para que puedan conservarlas en el sistema, ya sea por nostalgia, o para un recordatorio de decidir mejor al momento de hacer contribuciones a un proyecto de crowdfunding.
Lanzada al mercado en el 2013, Ouya fue uno de los proyectos mejor financiados de Kickstarter amasando $8.5 millones de dólares en contribuciones de usuarios. Se predecía que la consola rompería el balance de los sistemas caseros de la época, pero dicho suceso nunca ocurrió.
Los problemas del equipo de desarrollo de Ouya comenzaron a surgir al no encontrar una manera de mantener el interés del consumidor. En dos años, la consola ya había gastado $25 millones de los inversionistas y estaba ahogada en deudas. Razer compró los recursos y derechos de Ouya y cerró la producción de consolas.
Hasta siempre, Ouya. Diríamos que te vamos a extrañar, pero estaríamos mintiendo.
Vía: Eurogamer