God Eater 3 es el primer juego de esta franquicia en llegar a una consola de Nintendo, ya que hasta este momento había estado relegada —en consolas— a los sistemas de la familia PlayStation. Sin embargo, desde la muerte de PS Vita muchos fanáticos del juego deseaban que la franquicia diera el salto a la consola híbrida de Nintendo. Es así como la tercera entrega de este juego, que une elementos de exploración y mundo abierto ha aterrizado en Switch.
Historia — Del anime a nuestras consolas
En God Eater 3, como en cualquier serie de animación japonesa, el destino de la tierra depende de un grupo de adolescentes. Esto es un punto que se ha reforzado aun más en esta nueva entrega, ya que la historia tiene un peso más importante que en las entregas anteriores. Además, este es uno de los puntos que diferencia al juego de Bandai Namco de otros con temáticas similares como Monster Hunter. Sin embargo, no esperen grandes giros argumentales o una trama sumamente complicada, por que en God Eater 3 al igual que en cualquier otro shonen la historia es solo es un vehículo para introducirnos un nuevo conflicto. Eso sí cabe destacar los diseños del estudio de animación Ufotable, los cuales le brindan personalidad al título.
Jugabilidad — El cazador de Aragamis
En cuanto a la jugabilidad, no hemos encontrado un cambio significativo a lo ya visto en la entrega anterior. No obstante, en esta terca entrega si veremos una evolución orgánica de los enemigos del juego. Los Aragamis contarán con nuevas habilidades, movimientos y el modo ira que será todo un reto para los cazadores que decidan hacer frente a la amenaza. Esto también se traduce en nuevas técnicas para nuestros God Eater, los cuales ahora pueden incluir en sus armas afinidades elementales que ayudarán a crear mejores estrategias a la hora de combatir a los enemigos solos o en grupo. Lo anterior, sin lugar a dudas eleva las posibilidades de combos y atrae a el jugador experimentado del género que sentía que en las primeras entregas el sistema de batalla era un tanto simple.
La personalización no es solo para los avatares
Espadas, lanzas, mazos, guadañas y una gran variedad de cuchillos —entre otras— son las armas que tendremos a nuestra disposición en el juego. Todas estas tienen atributos diferentes, en cuanto a combos, velocidad, rango y niveles de daño que harán que cada jugador ajuste la adecuada a su tipo de juego. Adicionalmente, y al igual que en las anteriores entregas, las armas celestiales se transformarán para poder devorar a los enemigos. Cabe destacar que si devoramos a los Aragami con nuestras armas en modo depredador podremos acceder a un modo ira, el cual nos brindará mejoras significativas a nuestros ataques y desbloqueara las ‘artes de Ira’.
En cuanto al desarrollo de las misiones, nos encontramos con el mismo método que en la segunda entrega. Osea que todo lo gestionaremos desde nuestra base general. En ella conviviremos y hablaremos con otros personajes para de esta forma seguir con el desarrollo de la historia del juego. Adicionalmente, podremos gestionar nuestro equipamiento y los grupos con los que saldremos a cumplir nuestras misiones. Estos serán de a tres en solitario o en el modo multijugador, para las misiones normales, o de un máximo de ocho para las misiones de asalto.
Gráficos y Sonido
Este es quizás el punto más flojo del juego, ya que en comparación a los anteriores juegos —los cuales también fueron lanzados para PSP y PS Vita— no se siente un cambio gráfico y sonoro a la altura de la nueva generación. No obstante, gracias a este lunar la versión de la consola híbrida de Nintendo no se ve mal al ser comparada con la de PlayStation 4. Así que tendremos una sensación casi calcada a la hora de jugar en modo portátil o en el televisor.
Conclusiones — El regreso a los origines
God Eater 3 es un juego que gana mucho en su versión para Nintendo Switch, ya que volvemos a las raíces de la franquicia y en compañía de amigos las misiones rápidas con el ritmo desenfrenado que ha caracterizado al juego desde su comienzo en PSP nos brindan una diversión ideal para el modo portátil. Claro esta esto también se puede replicar en el modo en linea. Sin embargo, los jugadores que busquen una experiencia más acorde a los estándares actuales se encontrarán con un juego un poco desfasado en cuanto a gráficos y con una jugabilidad sesgada por sus inicios en PSP.