Después de varios retrasos y pruebas beta, Guilty Gear -STRIVE– finalmente está aquí. Aunque este juego de peleas es el último de una larga franquicia y marca el final del arco argumental que se estaba desarrollando desde los noventa, también representa un nuevo comienzo. Más específicamente, es un excelente punto de entrada al género de juegos de pelea.
Explicaremos porqué en nuestra reseña de Guilty Gear -STRIVE-.
Arc System Works sigue haciendo lo que hace mejor
Desde Guilty Gear Xrd (2014), Arc System Works ha recibido reconocimiento por el estilo artístico de sus juegos. Más allá de que el ‘cel shading‘ ha probado ser un estilo atemporal, es el uso dinámico de la cámara para lograr que los modelos luzcan como si fueran piezas en 2D junto con la deformación de dichos modelos lo que hace que los juegos de Arc System Works sean algunos de los más impresionantes a nivel visual. Guilty Gear -STRIVE– no es la excepción a la regla. De hecho, demuestra que el estudio ha estado puliendo sus técnicas de animación en los últimos años.
Por supuesto, el estilo visual de -STRIVE- tan solo es una parte de porqué su presentación es uno de sus fuertes. ¿Y qué es un Guilty Gear sin una pegajosa banda sonora de Daisuke Ishiwatari? No obstante, la de -STRIVE- se distingue de la de pasadas entregas por su énfasis en pistas vocales.
El final de la historia de Sol Badguy
John Carmack dijo una vez que la historia en un videojuego es como la historia en una película porno. Se supone que debe estar ahí, pero no es realmente importante. Si bien la trama no es la razón por la que muchos se harán conGuilty Gear -STRIVE-, tampoco ha de negarse que hay jugadores que han estado esperando el final de la pelea entre Sol Badguy y “Ese Hombre”.
Al igual que el modo historia de Xrd, la campaña no contiene jugabilidad alguna. No sería erróneo llamarlo una película animada. Si bien hay jugadores que prefieren lo hecho por NetherRealm Studios, la coherencia y ritmo de la historia de Guilty Gear -STRIVE- se ven beneficiados por la ausencia de jugabilidad. Si bien no es perfecta, los fanáticos ciertamente la disfrutarán. ¿Los demás? Tendrán que ponerse al día con el glosario y la línea de tiempo que ofrece el juego.
Un título para principiantes y veteranos
Toca dejar algo muy claro: Guilty Gear -STRIVE– es un juego muy diferente a Xrd y pasadas entregas. Como muchas otras franquicias del género han hecho en los últimos años, -STRIVE– supone una «casualización» de una de las franquicias con la barrera de entrada más alta. Desafortunadamente, la mayoría de series que hacen esto terminan alienando a los jugadores veteranos. Un buen ejemplo de esto es Street Fighter V, que supuso la omisión de múltiples funciones y opciones. Esto provocó que el plan de juego de cada personaje fuera más limitado y que la creatividad de los jugadores fuera mermada. Por fortuna, tal no es el caso con -STRIVE-.
Sí, Guilty Gear -STRIVE es un juego más lento y simple. No obstante, la baraja de opciones que provee a los jugadores —no importa cuál personaje escojan— es muy amplia. Esto se ve principalmente reflejado en el funcionamiento del sistema “Roman Cancel”. Dependiendo de la situación, los jugadores pueden activar esta función para librarse de combos enemigos y extender los suyos. El sistema es tan versátil que no hay una sola forma correcta de jugar con un personaje. ¿Aún suena complicado? No hay problema, ya que el juego contiene un muy detallado tutorial sobre todas las mecánicas. Incluso detalla las propiedades de diferentes ataques. Más allá de que las mecánicas de juego sean sólidas y provean libertad a los jugadores, otra razón por la que Guilty Gear -STRIVE– es un título tan accesible es su ‘netcode’. Cabe señalar que -STRIVE- es el primer juego de Arc System Works en utilizar ‘rollback’ y la mejora en la estabilidad de las partidas es evidente. No obstante, el emparejamiento podría recibir mejoras.
Reseña hecha con una copia digital de Guilty Gear -STRIVE- para PlayStation 5 brindada por Arc System Works.